BLOG Madrid PT 1

Empezamos el día con ganas, pues sabíamos que íbamos a pasárnoslo muy bien. Cogimos un taxi y fuimos al centro. Fuimos a una tienda muy chula de ropa, nos estuvimos probando cosas y viendo lo cute que era todo. Fuimos a comer al Sibuya, y si os soy honesta... ¡La comida no nos gustó nada! Los fideos que pedimos parecían salsa con fideos en vez de fideos con un poco de salsa. Salimos de aquel restaurante y fuimos caminando al centro. Lo primero que hicimos fue ir al Zen Zoo, es un sitio donde venden bubble tea y postres asiáticos, yo ya había estado allí ya que antes estaba en Salamanca pero lo cerraron. Pedí el bubble tea de siempre y un dorayaki ¡Probamos el anko por primera vez! Estaba buenísimo. Después de haber terminado, fuimos al kawaii café, una cafetería de cosas kawaii, comimos unos gofres arcoíris que estaban de muerte, y luego, nos hicimos fotos con accesorios que te dejaban en la tienda. Fuimos a dar un paseo por la plaza mayor, y estuvimos viendo un poco el mercadillo navideño ya que a las 6... Teníamos reserva para un sitio... Llegaron las 5:45 y teníamos que ir yendo, porque nuestra próxima parada era... ¡La gatoteca! Es una cafetería que está en un centro de adopción de gatitos, puedes acariciarlos, cogerlos, acariciarlos... Hay que tener cita previa. Fuimos para allá y me derretí, todos los gatitos eran super juguetones. Ese sitio estaba hecho para que adoptases gatos, pero si no querías no pasaba nada. Cuando salimos de allí (Que fue a las 7 pm) dimos otra vuelta, y cogimos otro taxi de vuelta. Nos dejó en la zona de bares de kaleido, una zona preciosa repleta de bares, tomé un zumo de fresa y frutos rojos que estaba riquísimo. A continuación, cogimos otro taxi y nos dirigimos hacia nuestro restaurante favorito... ¡El Asia- té! Otro sitio de comida asiática (Por si todavía no lo habéis notado AMO la comida asiática). Ya todos los camareros y personas que trabajan ahí nos conocen, en un abrir y cerrar de ojos ya nos habían traído la comida. Después de cenar nos fuimos a casa a dormir, esperando que pasaría al siguiente día.